Vitaminas, sueño y alergias - Antihistamínicos

¿Por qué hay alergia también en otoño?

La mayoría de plantas están en floración en primavera y es entonces cuando el polen invade el ambiente. Pero si eres alérgico al polen no puedes bajar la guardia en otoño. Algunos restos de plantas que hay en el suelo –como flores y polen– se ponen en suspensión con el viento y la lluvia y pueden rebrotar las alergias.

Además, el calendario de polinización se extiende a todo el año. Si vas al campo en otoño, la artemisia, las urticáceas y el ciprés tienen alta incidencia de polinización, sobre todo en la zona mediterránea. En la zona centro y norte de la península, en cambio, hay mayor incidencia de alergia a los hongos, como la alternaria.

Otro factor que incrementa las alergias en otoño es el repunte de infecciones virales, especialmente de las vías respiratorias. Además de producir los síntomas normales -congestión nasal, lagrimeo, estornudos, secreción nasal acuosa, tos– estos virus activan los efectos de la alergia y hacen que los síntomas se intensifiquen.

En otoño, además, hay mayor exposición a los ácaros, que también son causa de alergia. Si bien la alergia al polen es la primera causa de alergia en España, la alergia a los ácaros del polvo es también frecuente. La humedad típica de la época favorece los hongos, que también pueden ser alergénicos, por lo que pueden aparecer alergias en otoño. Una alergia no excluye a la otra, por lo que el otoño puede ser una época delicada para las personas que sufren alergia.

Los antihistamínicos ayudarán a manejar mejor la alergia y reducir los síntomas. También los descongestivos pueden ser de ayuda para conseguir respirar mejor durante tus brotes de alergia. Además algunas medidas fáciles de adoptar te ayudarán a prevenir los síntomas de la alergia.

En nuestro blog te contamos cómo hacer frente a las alergias y reducir sus molestos síntomas. ¡Síguenos!