Cuidado personal - Cuidado del bebé

Cómo conseguir que tu bebé duerma bien

Si tienes un bebé, seguramente te has pasado algunas noches en vela, o levantándote varias veces para atenderlo. Cuando se despierta a menudo llorando, o no puede dormir, su malestar puede deberse a varias causas. Ten en cuenta que la forma en que se expresan los bebés es mediante el llanto. Tal vez te está diciendo que algo concreto le molesta, ya sea en el entorno –condiciones de luz, de ruido, de temperatura– o en si mismo –erupción de los primeros dientes, cólicos en el vientre, irritación del culito o, simplemente, necesita tu contacto físico. En este post sobre cuidado del bebé te ofrecemos algunos consejos para que tu bebé duerma mejor, haciendo que pueda conciliar el sueño con más facilidad.

Las rutinas, seguridad para el bebé. Las rutinas ayudan a que el bebé pueda dormir mejor. Seguir la misma rutina antes de acostarse suele tranquilizar al bebé ya que, después de una actividad, viene otra ya conocida. Conviene acostarle y levantarle a la misma hora cada día, y mantener siempre la hora del baño y de la cena, en el mismo orden. Un baño antes de ir a dormir ayuda a relajar al bebé, y así puede conciliar mejor el sueño. Dentro de este cuidado del bebé, puedes aprovechar el momento de ponerle el pañal y el pijama para hacerle un masaje, le creará una sensación de bienestar y calidez que le ayudarán a relajarse.

El entorno, poca luz y poco ruido. Durante la noche, el cerebro disminuye su actividad, por lo que no necesita estímulos sensoriales. Oscuridad –o luz puntual y tenue– y silencio –o un poco de música suave para conciliar el sueño– son clave para conseguir un ambiente relajante para que tu bebé pueda dormir.

Aliviar o evitar posibles molestias antes de acostarle. Tu bebé puede presentar diversas molestias físicas, según la etapa en la que se encuentre. Quizás están a punto de salirle los dientes, y eso hace que esté irritable porque sienta dolor. Aplicar frío de forma local en las encías puede ayudar a aliviar el dolor. Los cólicos también son causantes de malestar en el bebé, especialmente al atardecer y antes de ir a dormir. Un masaje antes de acostarse, cuando no tiene cólicos, puede prevenir que aparezcan. Si ya los tiene, intenta calmarle y ayúdale a encontrar la mejor posición para dormir sin dolor. Otra molestia habitual es la irritación del culito. El roce del pañal durante todo el día puede provocar rojeces y, el contacto continuado de la piel con las heces y la orina, puede aumentar la irritación, dando lugar a dermatitis del pañal. Es importante poder ayudar a prevenir esta situación, y para ello la aplicación de una crema protectora para la piel del bebé le ayudará a regenerar la piel del culito en cada cambio de pañal.

Si tu bebé tiene piel atópica, las molestias en la piel pueden ser otra causa de que no duerma bien, especialmente durante los brotes. La aplicación diaria de una crema emoliente con pantenol y prebióticos ayuda a reforzar las defensas de la piel sensible y a regenerar la barrera cutánea. De este modo, tu bebé podrá espaciar el tiempo entre brotes de dermatitis atópica y encontrará alivio a su piel irritada, lo cual ayudará a mejorar su sueño nocturno. Recuerda, reducir el riesgo de molestias hará que tu bebé duerma mejor y que toda la familia descanse más. En nuestro blog, encontrarás más consejos y recomendaciones sobre el cuidado de tu bebé y sobre la salud y bienestar de toda la familia. ¡Síguenos!