Vitaminas, sueño y alergias - Otras vitaminas y complementos alimenticios

¿Cuál es el desayuno ideal para empezar el día al 100%?

Ya sea porque se te han pegado las sábanas y las prisas te impiden sentarte a desayunar, o bien prefieres comer algo más tarde en la oficina o el bar, lo cierto es que, a veces, apenas desayunas al levantarte. En este post te contamos cuáles son los nutrientes básicos que debe contener tu desayuno para que tu cuerpo tenga energía y vitalidad durante todo el día y pueda rendir mejor.

Vitaminas y minerales contribuyen al metabolismo energético y, sin estos micronutrientes, nuestro cuerpo no puede funcionar normalmente. Por otro lado, los hidratos de carbono y las proteínas son necesarios en tanto que forman parte de las estructuras de nuestro cuerpo, desde las células a los órganos, incluidos músculos y huesos. La fibra es también un tipo de nutriente muy adecuado en el desayuno, ya que ayuda a regular el tránsito intestinal, que ha estado en reposo durante varias horas en la noche. Otras sustancias, como la cafeína, son también oportunas en el desayuno, ya que ayudan a conseguir un estado de atención y alerta que ha desaparecido durante la noche.

La mejor forma de entender el valor que estos nutrientes aportan al funcionamiento de nuestro organismo es destacando algunos beneficios que te aporta una fórmula de desayuno saludable. Como ejemplo, un desayuno clásico:

Zumo de naranja + cereales con café con leche + tostada con aceite de oliva y chocolate

El zumo de naranja aporta vitamina C, un antioxidante imprescindible que protege nuestras células frente a agresiones y daño oxidativo y que, además, ayuda a nuestras defensas. Son diversas las propiedades de la vitamina C, por lo que es ideal incluirla a diario en tu dieta, especialmente en épocas frías, para ayudar a prevenir resfriados y otros síntomas invernales.

Los cereales son fuente de vitaminas del grupo B, esenciales para el metabolismo energético y, por tanto, su presencia es crucial para rendir física y mentalmente. Además, los cereales tienen un alto contenido en fibra, por lo que contribuyen a una regularidad intestinal y una buena digestión.

El aceite de oliva goza de fama por sus propiedades cardiosaludables y es uno de los ingredientes estrella de la dieta mediterránea. Los polifenoles de la oliva ayudan a proteger los lípidos de la sangre frente al daño oxidativo.

El chocolate cuenta con diversas propiedades nutritivas, siendo un alimento muy energético que, además aporta zinc, un mineral que ayuda a nuestras defensas.

Para asegurarte de incluir el desayuno en tu rutina, intenta mantener siempre el mismo horario y sacar partido de la gran variedad de alimentos de los que dispones, así no aborrecerás el momento del desayuno.

Recuerda, un desayuno completo ayuda a conseguir unos aportes nutricionales óptimos y mejora el rendimiento físico y mental, aportando la energía que tu cuerpo necesita para todo el día. Ten en cuenta que, además, en determinados periodos tu cuerpo puede requerir un aporte complementario de vitaminas y minerales. Es recomendable que los tomes en el momento del desayuno.

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