Cuidado personal - Cuidado de los pies

Trata tu infección de pie de atleta con una aplicación al día

Cuando se nos diagnostica una infección tendemos a suspender nuestra actividad normal del día a día. A veces limitamos nuestro deporte y nuestros hábitos sociales hasta que acabe el tratamiento y pase la infección. Sin embargo, no siempre es necesario. Un tratamiento cómodo y práctico sin duda ayuda a normalizar tu vida y seguir con tu día a día, cumpliendo con el tratamiento. Descubre en este post la forma de prevenir infecciones y desarrollar un cuidado correcto de la piel.

En el caso de una infección fúngica superficial, como el pie de atleta, no es necesario dejar de asistir, por ejemplo, al gimnasio o la piscina, si es nuestra actividad habitual. Tan sólo hace falta ser más cuidadoso con los pies para evitar el contagio de la infección, y por otro lado, escoger un formato de tratamiento que permita seguir con nuestra actividad de forma fácil.

En cuanto a la primera recomendación, hemos hablado en este blog varias veces sobre el cuidado del pie de atleta, y sobre cómo evitar la humedad en los pies: el uso de chanclas en las duchas públicas o compartidas, el uso de una toalla específica para los pies, o de un desodorante con acción antifúngica y antibacteriana, que respete la transpiración de la piel.

En cuanto a la elección del tratamiento para el pie de atleta, tanto el especialista como en la farmacia te recomendarán el más adecuado, pero es conveniente que conozcas que existen varias opciones y varios formatos entre los que escoger. Si lo que quieres es un tratamiento que sea práctico y fácil de aplicar, sin duda el formato spray es el más adecuado para ti. Práctico y cómodo, puedes aplicarlo en el vestuario tras la ducha y con los pies ya secos, con una sola pulverización sobre los dedos de los pies, asegurando que penetra entre los dedos y en la zona circundante. Fricciona hasta que se absorba del todo y lávate las manos después. La posología, es decir, cómo y durante cuánto tiempo se debe aplicar, depende del principio activo. En este formato spray, el tratamiento suele durar tres semanas, pero el hecho de que sea una aplicación al día lo convierte en una muy buena opción para seguir el tratamiento con la mayor comodidad y sin apenas darse cuenta.

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